septiembre 30, 2008

- Bodegueros y gestores de empresas turísticas

Cuando hablamos de desarrollos enoturísticos desde el punto de vista de la oferta y especialmente refiriéndonos a bodegueros, pequeños productores etc. tengo muchas veces la sensación de estar hablando de proyectos entre cuyos objetivos no se encuentra el de generar productos enoturísticos diferenciales y atractivos para un determinado público. Cuando hablo con emprendedores en este sentido, escucho a menudo hablar de rentabilizar una inversión en patrimonio inmobiliario, ganar en cuota de venta directa de vino etc.

No me parece en ningún caso que estos objetivos sean excluyentes con la finalidad de crear productos turísticos que nos avalen (en lo posible) el éxito. Ni mucho menos. Lo que defiendo es que si queremos sacar adelante un proyecto enoturístico es necesario no perder de vista la globalidad del proyecto, marcar desde el primer momento estrategias de desarrollo turístico coherentes con nuestras infraestructuras, territorio, producción, bodega etc.

Cuando nos entregamos a un proyecto enoturístico no dejamos de ser bodegueros, pero también tenemos que empezar a pensar como gestores de empresas turísticas.

Esto nos va a obligar a materializar nuestro proyecto en un plan de marketing (por sencillo que sea) que contemple en todos los casos, la parte turística en cuanto a desarrollo de producto, vías de comercialización turística, vías de promoción, segmentación de enoclientes etc.

Si no maridamos ambas cosas, seguramente tendremos entre manos, productos enoturísticos indiferenciados, difícilmente comercializables por las vías de distribución turística y en resumen, de poco recorrido o de escasa aportación para el emprendedor enoturístico.

Un tema que da para mucho y del que podemos seguir hablando.

septiembre 27, 2008

- Yo sigo con el tema: niños y cultura del vino

Del 19 al 23 de octubre se celebra en París, SIAL, de los salones de agroalimentación más importantes del mundo. Ojeando hoy su página web me he topado con algunas de las conferencias que se celebrarán en paralelo a la feria. Me ha llamado especialmente la atención una charla titulada Percepción sensorial y comportamiento de los consumidores. INRA Y digo que me ha llamado la atención porque muchos de los puntos que toca coinciden con los que pienso deben formar parte de la educación precoz que puede llevar a los niños a convertirse en consumidores responsables y formados de vino y por lo tanto deduzco que buenos amantes del enoturismo.

Durante el coloquio se abordarán dos temas principales.
  • Adquisición y formación del gusto durante la infancia. Se tocarán dos apartados bajo este denominador común: Infancia como etapa clave en la formación de las preferencias alimenticias y en segundo lugar, ¿Preparamos el desarrollo del gusto?

  • Gusto y consumo. El desarrollo del tema se centrará en debatir sobre qué memorizamos en el consumo de alimentos y el impacto de las características sensoriales de los productos en el perfil de los consumidores.
Evidentemente esto suena bastante técnico, pero actividades similares con un marcado carácter lúdico deberían en mi opinión, formar parte de la aproximación de los niños a la cultura del vino.

Me alegra saber que poco a poco la cultura de la viña y el vino va llegando a nuestros niños y se abre paso socialmente. Desde luego la vendimia es uno de los hitos dentro del ciclo de la vid que más se presta para ello. Hoy leía en las páginas de Rutas del vino, una propuesta de paquete para que la familia comparta un día con los niños, vendimiando y disfrutando de la fiesta y el territorio. Una excelente iniciativa. Rutas del vino

septiembre 22, 2008

- Las DO favoritas de los usuarios de TrypAdvisors

TrypAdvisor acaba de publicar una interesante lista de las DO favoritas de sus clientes a la hora de practicar enoturismo. tripadvisor La lista podría pasar desapercibida si no fuera por que detrás de TrypAdvisor se encuentra una de las comunidades de viajeros más grande del mundo y cuyas opiniones sientan cátedra a la hora de que otros muchos millones de personas, tomen decisiones sobre los lugares y hoteles que visitar. En su web se habla de 24 millones de visitantes al mes, seis millones de miembros registrados y más de 15 millones de críticas y opiniones.
Los usuarios de TrypAdvisor han elegido las siguientes denominaciones como sus favoritas para realizar viajes de enoturismo:
  1. Burdeos – Francia. (1)
  2. Napa Valley – California. (2)
  3. Toscana – Italia. (3)
  4. Champagne – Francia. (4)
  5. Barros Valley – Australia. (5)
  6. La Rioja – España. (6)
  7. Sonoma Valley – California. (7)
  8. Valle Central – Chile. (8)
  9. Stellenbosch – Sudáfrica. (9)
  10. Marlborough – Nueva Zelanda. (10)
Es verdad que la lista habrá que tomarla con precauciones, por ejemplo sobre el sesgo de las votaciones, teniendo en cuenta países de implantación o ausencia de la propia web y por lo tanto peso de votantes y opiniones de esa zona. También habrá que pensar que algunos viajeros más que de enoturismo habrán vertido sus opiniones sobre vinos favoritos. Pero como de todo merece la pena aprender, yo diría que echo en falta algunas ausencias notables.

¿Qué opinarán los franceses de la ausencia de Borgoña? ¿Qué pensarán los franceses de que en la lista haya dos DO francesas y dos DO californianas? ¿Y el enoturismo centroeuropeo? No aparece Alemania ni Austria, ni el Tokaj húngaro... Italia sólo tiene presencia con Toscana y España con Rioja... Qué aparezcan en este listado DO modestas como Sonoma o el Valle Central de Chile suponen un buen punto para la reflexión. ¿El vino y el enoturismo van juntos obligatoriamente?¿Podrían abrirse océanos azules para algunos productores de vinos con marcas y DO poco conocidas pero que navegaran bien por mares turísticos?

septiembre 16, 2008

- Relación gastronomía y conocimiento del vino

Ojeaba ayer una de las direcciones web de las que me reconozco devota Vitisphere y me detuve en uno de los capítulos que los franceses dedican al estudio de tendencias actuales en mercados enológicos compradores de vinos galos. El 28 de agosto publicaban precisamente la evolución de las importaciones de vinos en Japón. Se mostraban los “vitisphéricos” preocupados por la competencia al alza del vino español frente a los vinos franceses en el mercado nipón. (Una progresión del 50% en 5 años)

¡Ostras! Esto me interesa, pensé inmediatamente ¿Qué hemos hecho en Japón para robar cuota al prestigioso vino francés? Me vino de inmediato a la cabeza las preocupaciones que manifestamos recientemente en las Jornadas de INCAVI “desciende el consumo de vino y no tenemos nuevos consumidores” y que yo traduzco enseguida en un “Nos va a ser más difícil impulsar el enoturismo, si no tenemos enoturistas”

La respuesta la encontré en el mismo documento. La moda del vino español ha venido tras un fuerte impulso de la cocina española en Japón y un esfuerzo promotor de las administraciones por incorporar cultura española a través de la gastronomía.

Volviendo a la bajada de consumo de vino en Catalunya y al desconocimiento de las DO. catalanas entre los propios locales, me parece que efectivamente la unión de gastronomía y vino es indiscutible y promover vino, territorio... será mucho más fácil si hay un maridaje de éste con la cultura de las cazuelas.


Seguro que esta boda de enología y gastronomía como elemento promocional cara a las administraciones, no es la panacea que nos va a curar todos los males pero puede ayudarnos un poco a marcar ciertas direcciones. A mi, que tengo la doble nacionalidad vasco-catalana, me resulta más sencillo comer cocina de mi tierra de nacimiento en Barcelona que hacerme un menú de cocina catalana. ¿Algo falla o no?

septiembre 11, 2008

- Señalización de bodegas

Este pasado mes de agosto aprovechando la pausa estival y aprovechando que en Artesa de Segre celebraban la Fira de Sant Bertomeu con presencia de productos locales, me encaminé hacia Lleida. Mis planes eran rematar el día en la feria y abrirlo visitando las bodegas de Costers del Sió, subzona dentro de la D.O. Costers del Segre.

Me fui imposible llegar a tiempo a pesar de que había previsto tiempo por si surgía algún problema. Tenía la dirección exacta de la bodega pero no encontré ninguna indicación en la carretera, ninguna señalización de ningún tipo, ni un cartel a la vista, nada. Era domingo, bodega cerrada por la tarde, así que me quedé sin visita enoturística.

¿A quién corresponde señalizar las bodegas? No lo sé, pero si queremos apoyar el enoturismo, tenemos que solucionar los problemas de base y unas indicaciones claras y precisas de cómo llegar a las bodegas, forman parte de las infraestructuras mínimas de las que un enodestino, tiene que preocuparse. Recomendaría también a las propias bodegas que cuidaran en su documentación y sobre todo en sus páginas web, de que estos datos aparecieran bien claros y si es posible que en su documentación para enoturistas añadan las coordenadas que permitan el acceso utilizando el GPS.

En todo caso me resarcí estupendamente con otra bodega vecina y dando buena cuenta de un excelente Flor de Grealo, un coupage de Merlot, Cavernet y Syrah que los hermanos Pijuan -los padres de la criatura- me hicieron conocer. Un vino complejo, con gran equilibrio entre acidez y taninos... en fin, totalmente recomendable.

- Cifras para la reflexión

Repasaba hace unos, las cifras del gasto medio bodega/viajero en diferentes denominaciones de origen. Me gustaría compartirlas porque son demoledoras. En Alsacia: 90 €, en Borgoña: 75 €, en Australia: 50 €, en Napa Valley, en California: 90 €, en la Ruta del vino de Alemania: 80 € y en la Rutas del vino y el cava del Penedés ¡¡¡menos de 10€!!!!

Voy con otras cifras. Estancia media del turista de vino en número de días. En Alsacia: 4 días, en Borgoña: 5 días. En zonas vinícolas de Australia: 3 días, en Napa Valley: 2,9 días y por fin, en las rutas del vino y el cava del Penedés ¡¡¡menos de un día!!! Lo que quiere decir que pernoctaciones, cero.


Supongo que habrá en España otras denominaciones que saldrán mucho mejor paradas pero las cifras son cuanto menos preocupantes. ¿Qué estamos haciendo mal? También me pregunto ¿Qué no estamos haciendo los “TUR” por el enoturismo?

- Niños. Futuros consumidores

“Nuevos hábitos y Nuevos consumidores” Este es el título de una jornada organizada recientemente por el INCAVI. El consumo de vino desciende en España, los vinos de Catalunya son poco conocidos entre los propios catalanes lo que no ayuda a mantener las cifras de consumo. En las jornadas hablamos de nuevos tipos de consumidores, a mi me parecía en este sentido que no se podía dejar de lado el papel activo de las mujeres en la compra y extensión de la cultura del vino. Hablamos también de formatos de vinos para singles, vinos con menor graduación, polarización del vino en las gamas medias y altas....

Si estamos hablando de nuevos consumidores creo que debiéramos reparar en los niños, por que ellos serán los consumidores del futuro (¡Esto me ha quedado casi de parábola!). Sé que decir esto resulta impopular y alguien pretenderá llevarme a la hoguera pero fundamentaré mi osada opinión en dos argumentos.

El vino, los cuidados de la viña, la vinificación, la filoxera, la recogida de la uva, pisar los granos, las fiestas de la vendimia, cocinar con vino.... son parte de nuestra cultura. Vivimos en un país donde faltaba el agua y el vino se integraba en nuestra vida. El vino, el cava... no sólo son bebidas. Es nuestro patrimonio cultural, es nuestro pasado, y forma parte de nuestra idiosincrasia y nuestra forma de aprehender el mundo. Debemos enseñar a nuestros niños la cultura del vino, como les enseñamos la cultura textil o nuestro pasado fabril o los molinos donde antaño se fabricaba el papel o el aceite.

Creo que las instituciones debieran acercar a los niños a la cultura del vino, desde un punto de vista de patrimonio y de historia y lo mismo que incluyen en las actividades escolares, visitas de tipo histórico o industrial (Molinos papeleros, de aceite, colonias industriales, viejas centrales eléctricas...) debieran incluir visitas a bodegas, salidas a viñedos, participación en fiestas de la vendimia, en recogida de la uva, actividades en museos del vino etc. Claro que esto implica acercarse al vino con naturalidad y perder por el camino tanta mojigatería como hoy domina la sociedad con este tema.


Me parece que este tipo de visitas se prestan para educar a los niños, primero en la valoración del trabajo y del respeto a la tierra y en segundo lugar, favorecen un acercamiento natural al vino, pues nos permiten con actividades basadas en los sentidos (oler, ver, probar...) y sin vino naturalmente, preparar a los verdaderos consumidores del futuro, consumidores responsables y con una cultura sensorial importante que nos ayudará a apartarlos del alcohol como simple excitante y acercarlos al vino como disfrute de los sentidos.
(c) Alicia Estrada